EN TUS MANOS LA VICTORIA, NUEVA MARCHA PROCESIONAL

La Hermandad de los Mutilados cuenta con una nueva composición que incrementará el patrimonio musical de la Hermandad. "En tus Manos la Victoria", obra compuesta por Jesuli Perojil, en conmemoración del 75 aniversario del Santísimo Cristo de la Victoria. 

La obra transcurre casi en su totalidad en la tonalidad de Fa menor, la más común para este tipo de composiciones. Arranca de manera enérgica y contundente con un primer compás ejecutado casi al unísono por la totalidad de la banda, que sirve de anuncio de lo que está por venir.
La voz piana comienza una breve introducción rematada después por la voz forte de manera contundente, que después de detenerse bruscamente, enlaza con el siguiente pasaje mediante intervalos descendentes.

Esto da paso de nuevo a la voz piana, en un pasaje que representa justo el momento en el que Jesús está contemplando la Cruz en el suelo, la música intenta transmitir la nostalgia y la resignación del momento. Tras un crescendo, la voz forte entra en escena para interpretar un pasaje, que se repite con ligeras variaciones, creciendo en intensidad y dramatismo. Este pasaje enriquecido con el movimiento de las trompetas, simbolizan el momento en el que Jesús es clavado al madero y es izado.

Posteriormente llama la atención dos compases sin percusión donde “el tiempo se detiene”. Un brevísimo puente, hace de reposo y da entrada a un solo, que reposa sobre las redondas de los bajos y las corcheas en stacatto de la trompeteria. Solo, que después se convierte en dúo ejecutado al unísono simbolizando la conversación de Jesús con su madre que se encuentra a los pies de la Cruz. Tras ello, entra de nuevo la voz piana ejecutando el pasaje que representa que todo se ha consumado. Jesús yace muerto en la Cruz.

Enfilando el tramo final entra la totalidad de la banda en forte, con una melodía que intenta representar el dolor, la rabia, la crudeza del momento vivido y el desgarro del alma. Tras un silencio súbito y para reforzar el mensaje de esta parte final, la obra modula a la tonalidad de La bemol menor con el mismo motivo, añadiéndole más dramatismo al momento.

Finalmente se retoma la tonalidad original y concluye la obra, recuperando el motivo del primer compas, “cerrando el círculo” y representando que todo se ha consumado, tal como estaba escrito.

Desde estas líneas queremos agradecer a su compositor por tan magnífica ofrenda, a la Banda de Cornetas y Tambores Jesús Nazareno por su calidad musical y por acompañar al Santísimo Cristo de la Victoria durante más de veinticinco años y a D. David Hidalgo Moreno pro presentar el acto.